LA NACION // CALETA OLIVIA.- Nicolás Jofré, tiene 27 años, y para él, el fin de semana pasado fue Navidad: bajó el precio en la pollería que tiene en la localidad y vendió en dos días cuatro toneladas de pollo a $89.90 el kilo. Es dueño de una de las seis pollerías de la ciudad que se sumaron a “Precios Solidarios”, una propuesta que impulsa el municipio local, a cargo del intendente radical, Facundo Prades: un “boom” de ofertas en artículos de primera necesidad para capear la crisis y reactivar el consumo. La iniciativa primero fue mirada con desconfianza, hasta que Leopoldo Fonte, un carnicero correntino, revolucionó la ciudad con la primera oferta en su pizarra, “$149.90 todos los cortes de carne”. En pocas horas, vendió 4.000 kg. El entusiasmo de Fonte, quien se ganó el apodo del “carnicero del año”, entusiasmó a otros comerciantes que se sumaron y el fin de semana pasado en la localidad se vendieron 10 toneladas de pollo a $89.90 y 500 kg de merluza a $100 el kg, todos en precio de súper oferta. La iniciativa promueve beneficios para los comerciantes que se sumen, analizan condonar impuestos y les dan publicidad gratis de las ofertas. “Fue una gran experiencia uno no sabe lo que va a pasar, compramos mas mercadería que lo habitual y el día anterior pensábamos, y si no viene gente y si me queda mucho pollo”, cuenta hoy a LA NACION Jofré, quien ya se prepara para repetir la experiencia. [caption id="attachment_47335" align="alignleft" width="620"] "Good Chicken", la pollería de NIcolás Jofré. Foto: Municipalidad de Caleta Olivia[/caption] El comerciante llegó a los 19 años desde Villa Mercedes, San Luis, “sin nada, vinimos con las manos vacías” remarca y agradece a la ciudad que le dio la oportunidad de crecer. El negocio familiar se abrió hace cuatro años a dos cuadras del Gorosito, el enorme monumento al trabajador petrolero que marca el pulso de la ciudad. Hoy tiene diez empleados en dos sucursales. “Me dio un orgullo enorme ver el negocio lleno, ver a los empleados trabajando y mas aún a la gente contenta”, detalla Jofré, con la tonada puntana aún en la voz. El pollo lo recibe dos veces por semana desde un frigorífico de Roque Pérez, provincia de Buenos Aires. Lo pagó de costo a $79.90, y le quedó un bajísimo margen de ganancia de solo $10 pesos por kg. Así y todo el enorme volumen de venta compensó el bajo precio. De atender 200 personas por día, logró que entren a su local 600 personas, en los dos días que duró la oferta. “La gente compró pollo fresco, pero también le pudimos ofrecer milanesas, hamburguesas, pechuga sin hueso y otros productos, nos generó un gran movimiento”, detalla el comerciante. La iniciativa municipal nació para activar el alicaído comercio local, “ante este escenario de crisis que pone en riesgo la continuidad de los locales comerciales y que también obliga a los vecinos a cambiar sus hábitos debido a los altos precios, impulsamos la idea apuntando siempre a que sea un trabajo solidario”, detalló a LA NACION, Antonio Quiroga, subsecretario de Comercio, Bromatología y Desarrollo Productivo del municipio. Los locales que se adhieren a la iniciativa tienen una oblea que los identifica como parte del programa “Precios Solidarios”, sus ofertas son publicitadas en medios y redes sociales y desde el municipio espera que el Concejo Deliberante les apruebe una condonación de impuestos a quienes se sumen. [caption id="attachment_47337" align="alignleft" width="300"] David Angenelo, pescadería "Manjares de Mar". Foto: Municipalidad de Caleta Olivia[/caption] Otro comercio que se animó a la oferta, fue la pescadería David Angenelo, quien vendió en dos días 600 kg de merluza fresca a $100 pesos, “el precio más bajo del país”, afirma orgulloso a LA NACION, quien viene de una familia italiana con tradición de mar. Su abuelo llegó desde Sicilia, el nombre de su firma es un homenaje a esa historia, “Patagonia Selvaggia”. Angenelo también suma su propia historia de migración interior. Llegó aquí desde Mar del Plata a trabajar como marinero en el año 2007. Pasarían varios años hasta que logró tener su propio barco de pesca artesanal y un camión frigorífico, la clave para garantizar pescado fresco, a Caleta Olivia y proveer a varias ciudades de la Patagonia. “El barco sale a las 5 de la mañana. Llega de noche, se descarga, se filetea de madrugada y al día ya está listo para la venta. Me interesa poder vender mayores volúmenes a bajo costo, es mi idea de negocio”, detalla Angenelo. Con esa idea, y con lo que pesca su propio barco, Angenelo ya tiene un buen precio en la merluza fresca, en un día normal, el vende a $125 el kg de merluza fresca. “Los días de mas venta, son de lunes a miércoles, pero con Precios Solidarios, logré mucha venta en dos días poco habituales para mí que son los viernes y sábado”, explicó. La idea del marinero es cruzar las fronteras de la Patagonia. Ya alquiló un frigorífico en Quilmes y desde allí espera en pocos días empezar con la distribución de pescado fresco por los municipios de la zona, estima pasaran entre 36 y 48 hs desde que lo procesan en el puerto y llegue a Buenos Aires. Mientras espera la expansión del negocio, ya confirmó que participará del programa municipal el próximo fin de semana, con la ventaja, que su producto, lo tiene a pocas horas, mar adentro, en el Golfo San Jorge.-